lunes, 21 de abril de 2014

Cuando Cristo Venga

1 Tesalonicenses 4:16

Reina-Valera 1960 (RVR1960)

16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. 
17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.

Has pensado cuando llegue el día en que para los escogidos, todo el mal acabe? todo el sufrimiento? toda situación difícil?

Yo si, en estos dias que la mayoría celebra la semana santa me he puesto a meditar sobre el legado e historia que dejó el Señor en nuestro mundo.

Porque el Señor Jesús mismo nos dijo que el volvería lleno de gran gloria y majestad, yo anhelo su regreso, yo quiero verlo cara a cara y no es ser conformista como dice Marcos Vidal en una de sus canciones, "no me importa el lugar de la mesa que me haga sentar o el color de mi corona si la llego a ganar".

Has pensado en el momento en que Dios de la orden en el cielo de que Jesús regrese por su iglesia?  En sus palabras Jesús mismo nos pide que seamos pacientes, que velemos y oremos  y que anhelemos su regreso.

Ahora resaltando algunos textos del libro de Max Lucado con el mismo nombre de está pequeña publicación me resulta apasionante esperar ese día, desde hace unos meses para acá no puedo dejar de pensar en su regreso, en que debo vivir en santidad y buscando seguir sus pasos.

Cito algunas partes que me llamaron la atención de lo que escribió el señor Lucado. 

¿Cuándo vendrá?

No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí ...vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo. Juan 14.1 , 3
 

Un día digno de esperarse

¡Cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir, esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios! 2 Pedro 3.11– 12 


Un día de prueba y promesa

Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida. 1 Corintios 15.23 


Un día de reencuentro feliz

Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras. 1 Tesalonicenses 4.16– 18 

Día de rejuvenecimiento

Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo en su venida. 1 Corintios 15.23 


Un día de redención

Permaneced en Él, para que cuando se manifieste tengamos confianza, para que en su venida no nos alejemos avergonzados. 1 Juan 2.28 


Un día de premios

Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, le halle haciendo así. Mateo 24.46 


Un día de agradables sorpresas

Ustedes son nuestra esperanza y gozo, y la corona de la que nos sentiremos orgullosos cuando el Señor Jesucristo venga. 1 Tesalonicenses 2.19 


Un día de perdón permanente

Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento,
hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre. Mateo 24.38– 39

Un día de gozo indescriptible

Sabemos que cuando Cristo venga otra vez, seremos como Él es, porque le veremos como realmente es.  1 Juan 3.2
 
Un día de celebración sin fin

Yo prometí daros a Cristo, como su solo esposo. A vos quiero daros como su novia pura. 2 Corintios 11.2